
“Menta: una planta que cuida”
La planta de cannabis es una maravillosa planta virtuosa, sin embargo, existe una gran diversidad de plantas medicinales en nuestro entorno natural. Semillas silenciosas ha decidido presentarles mensualmente una especie vegetal con beneficios terapéuticos comprobados. Para el primer artículo de esta serie, elegimos mint. Es una planta herbácea aromática, que tiene su origen en el norte de África, en la zona del Mediterráneo y en Asia Central. Se utiliza frecuentemente, entre otras cosas, para calmar trastornos digestivos, respiratorios e inflamatorios.
Una gran mayoría de personas aprecia la menta, sobre todo por su olor y sabor fresco, dulce, único y relajante. Además, este último calificativo adquiere aquí todo su significado, porque la menta es claramente una planta aromática cuyas virtudes beneficiosas para la salud ya son reconocidas. Se suele utilizar para la preparación de diferentes infusiones, pero también en gastronomía.
Como bien decía Hipócrates, el padre de la medicina moderna, “deja que tu comida sea tu única medicina”. Aunque esta frase se remonta al siglo V a.C., aún hoy conserva todo su significado. La menta es una planta aromática con multitud de variedades (hierbabuena, verde, marroquí, poleo, china, glacial, manzano, tailandesa, ricqlès, etc.) que se encuentra fácilmente en estado natural, en numerosos jardines particulares, bosques u otros lugares naturales. espacios. Por supuesto, cada variedad tiene sus propiedades específicas.
Tipología de menta

La menta es una especie vegetal que pertenece a la familia Lamiaceae, que crece en regiones templadas y cálidas del globo. La albahaca, el tomillo, la lavanda, la salvia, el romero, el orégano y la melisa también entran en la misma categoría. Es una planta herbácea que alcanza unos 70 cm de altura, que crece de forma silvestre, pero que también puede cultivarse en determinadas condiciones. En su estado natural, la menta crece con mayor frecuencia en zonas húmedas y sombreadas, y se cosecha durante el período estival.
Origen ancestral de la menta
Esta planta muy fragante proviene de una vasta región, que incluye el norte de África, la cuenca mediterránea y Asia occidental. Hemos encontrado obras datadas en Grecia y la Antigua Roma, que mencionan los primeros usos de la menta por parte del Hombre. También sabemos que era comúnmente utilizado por los hebreos y egipcios. Fue a partir de esta época que pudimos comprobar que estas civilizaciones exportaban estos últimos a todo el Viejo Continente. Gracias a estos manuscritos que datan del siglo I d.C., supimos que los romanos utilizaban las hojas de menta para realzar sus platos culinarios. También se cultivó en jardines y monasterios europeos ya en el siglo IV. Sólo un poco más tarde, durante el siglo XVII, se descubrieron las propiedades medicinales del aceite esencial de menta que hoy conocemos.
“ Propiedades de la menta »
Entre las múltiples propiedades beneficiosas presentes en la menta, destacan 5 grandes virtudes. La menta ayuda a una mejor digestión, previene enfermedades cardiovasculares, es un excelente analgésico, alivia las vías respiratorias y contribuye al aporte de hierro y a desintoxicar el hígado.
Mejora la digestión
La menta es una planta aromática con reconocidas propiedades digestivas. En caso de digestión difícil, hinchazón o dolor intestinal recurrente, la menta fresca puede ayudarte. También se ha demostrado su eficacia en casos de estreñimiento y diarrea. Nada más sencillo para beneficiarte de sus propiedades beneficiosas, basta con añadirla a tus platos o beber infusiones de menta fresca después de una comida.
Prevención de enfermedades cardiovasculares.
Algunas investigaciones científicas han demostrado que la menta retrasa la oxidación del colesterol malo. Parecería que este poder natural es significativamente mayor en esta última, en comparación con otras nueve plantas que tienen una acción similar. Es importante recalcar que oxidación del colesterol LDL en la sangre es un factor de riesgo importante que puede facilitar la aparición de enfermedades cardiovasculares.

“Una idea detox para el día después de la fiesta: tómate una cura de menta fresca”
Analgésico reconocido
Si sufres de dolores musculares o articulares, prepara una infusión de menta fresca, ya que tiene una eficaz acción analgésica. También tiene propiedades antisépticas, también alivia las picaduras de insectos y desinfecta las heridas. Además, parece que tiene la capacidad de calmar los dolores de cabeza y el sistema nervioso.
Alivio respiratorio
Algunos estudios han demostrado que la menta tiene propiedades antibacterianas y expectorantes.
Por tanto, no es casualidad que la acción de sus distintos principios activos le permita aliviar la tos, despejar las vías respiratorias y descongestionar las fosas nasales. Esta eficacia se debe a la presencia de un terpeno llamado mentol, que también se encuentra en determinadas variedades de cannabis. Este último ofrece la posibilidad de eliminar flemas y mucosidades. Para este caso específico, se recomienda utilizar aceite esencial, el cual debe aplicarse en el pecho o rociarse por inhalación para favorecer el paso por las vías respiratorias. (aromaterapia / medicina herbaria).
Ingesta de hierro y desintoxicación del hígado El hierro es un elemento mineral importante para la buena oxigenación de nuestras células y de los tejidos del cuerpo. Cuando una persona tiene deficiencia de hierro, esto se traduce en palidez, fatiga permanente y dolores de cabeza recurrentes, acompañados de escalofríos. Para contrarrestar este fenómeno, recomendamos consumir menta fresca para poder aportar una cantidad suficiente a nuestro organismo. Simplemente prepara una infusión o añade menta a tus preparaciones alimenticias.
Con el actual y gradual levantamiento de las medidas sanitarias relacionadas con el Covid-19 y la posibilidad de volver a salir de fiesta en bares o discotecas, seguro que pondrás a prueba tu cuerpo. Así que una buena idea detox para el día después de la fiesta es hacer un pequeño tratamiento de menta fresca. Cuando se come demasiada grasa y/o se bebe mucho alcohol, el cuerpo necesita un poco de descanso, especialmente el hígado. La función hepática de la menta le permitirá eliminar más fácilmente lo que recibe. Este consejo también se aplica a las vacaciones de fin de año.
